20 de marzo de 2013

Un estudiante de Nueva York asegura haber creado un gel que detiene las hemorragias de forma instantánea.

¿Cómo? el producto utiliza plantas modificadas genéticamente y se puede almacenar a temperaturas de entre 33 hasta 90 grados Fahrenheit. Una forma sintética de la matriz extracelular (MEC), una parte de tejido del cuerpo que mantiene las células juntas y activas en el proceso de coagulación. Veti-gel se une a MEC para formar una cubierta que imita la piel y es capaz de eliminar la necesidad de aplicar presión sobre la herida.
Si bien existen otros productos para curar rápidamente las heridas, como QuikClot, apósito utilizado por los militares, este requiere de varios minutos de presión sobre la herida. Este gel que detiene las hemorragias puede ser utilizado tanto para heridas internas como externas, así como quemaduras graves, siempre funcionando al instante.
En Irak se han probado otros productos novedosos de primeros auxilios menos eficaces y más caros que QuikClot. Es el caso del vendaje HemCon, que se adhiere magnéticamente a la herida. Se basa en el chitosan, un pegamento natural presente en algas y caparazones de moluscos, cuya carga eléctrica positiva hace que sea atraído por la carga negativa de los glóbulos rojos y bacterias. Es mucho más caro que QuikClot (más de cien dólares una venda de 10 cm2), dura menos tiempo, tarda hasta cinco minutos en cerrar la herida y puede provocar alergias. Según escribía José A. Canedo en la revista Defensa.
Para hacer frente a los shocks, si bien no existe un sustituto de la sangre, el recurso al suero salino está siendo desplazado por el Hetastarch (hidroxietil starch o HES). Su elevado peso molecular evita que sea rápidamente expulsado del organismo por la orina: dos tercios de la dosis permanece en la sangre de individuos sanos después de ocho días, y toda ella en las primeras ocho horas tras su aplicación, mientras que del suero salino sólo queda el 40% después de una hora.